Existen diversos ejercicios para la fibromialgia, aeróbicos, que pueden ayudar a las personas con fibromialgia a aumentar su calidad de vida. Estos ejercicios suelen ser actividades que van desde el yoga, pilates, la natación y otros ejercicios suaves que ayuden a fortalecer los músculos.
Hoy, desde Fibromialgia Sevilla, te hablamos de las virtudes del Tai Chi para tratar la fibromialgia.
Beneficios del Tai Chi y sus ejercicios para la fibromialgia
Los estudios más recientes han demostrado que el Tai Chi puede ayudar a las personas a reducir el estrés, mejorar la postura, el equilibrio y la movilidad general, y aumentar la fuerza muscular en las piernas.
¿Qué es el Tai Chi?
El Tai Chi es un ejercicio que combina la respiración profunda y la relajación con movimientos fluidos. Originariamente se desarrolló como arte marcial en el siglo XIII en China. Hoy en día se practica en todo el mundo como un ejercicio que favorece la salud.
¿Cómo ayuda el Tai Chi a las personas con fibromialgia?
Ya sabemos que la fibromialgia es una enfermedad crónica donde el dolor se apodera del cuerpo. Las causas son desconocidas y no tiene cura. Los tratamientos tienen como objetivo ayudar a la gente a lidiar con el dolor, y la fisioterapia y el ejercicio han demostrado ser muy beneficiosos.
Hace unos pocos años se realizó un estudio en EEUU con 226 personas con fibromialgia y se les dio a elegir entre tomar clases de ejercicios aeróbicos o clases de Tai Chi.
Aeróbico es un término genérico que describe una gran variedad de ejercicios diseñados para elevar el ritmo cardíaco y, al mismo tiempo, fortalecer y estirar los músculos.
Por otro lado, el Tai Chi es un arte marcial chino enfocado en lograr la calma mental a través de movimientos físicos suaves, fluidos y de bajo impacto.
Las 226 personas fueron asignadas a cualquier tipo de ejercicio una o dos veces por semana durante 12 o 24 semanas. Hubo una mejoría general en cada grupo, aunque concretamente las personas que hicieron Tai Chi observaron una mejoría mayor en sus síntomas que aquellos que hicieron ejercicios aeróbicos.
Por este motivo, el Tai chi puede ser una buena opción para las personas con fibromialgia, ya que es poco probable que cause lesiones o daños y se puede adaptar a la capacidad individual.
Pilates para fibromialgia
El Pilates, conocido por su enfoque en la alineación del cuerpo, la respiración y el desarrollo de un núcleo fuerte, se ha revelado como una herramienta terapéutica efectiva para quienes padecen fibromialgia. Esta condición crónica, que provoca dolor musculoesquelético generalizado y fatiga, puede ser manejada de manera más efectiva con la práctica regular de pilates para tratar la fibromialgia.
El pilates ayuda a las personas con fibromialgia de varias maneras. En primer lugar, fomenta una mayor conciencia corporal y control muscular, lo cual es crucial para manejar las tensiones y dolores asociados con esta enfermedad. Al enfocarse en la respiración y el movimiento controlado, pilates ofrece una forma de ejercicio de bajo impacto que mejora la movilidad sin sobrecargar las articulaciones doloridas.
Además, el pilates puede contribuir a mejorar la calidad del sueño, un desafío común en quienes sufren de fibromialgia. El ejercicio moderado y regular, como el que proporciona pilates, ha demostrado ser beneficioso en la regulación de los patrones de sueño. Asimismo, la práctica del pilates se asocia con la reducción del estrés y la ansiedad, factores que a menudo exacerban los síntomas de la fibromialgia.
Otro aspecto importante es la mejora de la fuerza y la flexibilidad. El pilates, al fortalecer el núcleo y mejorar la elasticidad del cuerpo, puede ayudar a reducir la rigidez muscular y aumentar la tolerancia al ejercicio, lo cual es esencial para quienes luchan contra la fatiga y el dolor crónico de la fibromialgia.